JULIO ABASOLO ALDEA/ DEFENSA DE UN VOLANTIN

-!Alto, señor policia
no tiene ningùn derecho!
¿Què le hace mi volantin
si està allà arriba en silencio?

-Usted mandarà en la tierra,
pero no en el firmamento.
-Si baila mi volantìn,
lo hace de puro contento.
Y ambos cantamos felices
sin faltar al reglamento.


-¿Es que tambìen le molesta
la guitarrita del viento?

-Sepa que mi volantin
es todo un caballero;
compadre de las estrellas
y ciudadano del cielo.

-Conoce a todos los astros,
y trata de tù a San Pedro.
-Si viste colores vivos,
voy a contarle el secreto,
èl fue payaso de circo
allà en sus lejanos tiempos.

-¿No ve sus saltos moratales
y las vueltas de carnero?

-¿Por què no me llevan al retèn
a los malos de mi pueblo,
al niño que estudia poco
o que castiga a su perro?.

-¿es que usted no tuvo infancia
o se olvidò de aquel tiempo?

-Finalmente, polìcia
si no logro convencerlo.
muy siemple..., le corto el hilo,
y ¡adios volantin de ensueño...!

-!Corra..., suba...y si lo coge,
mañana lo haràn sargento...!