El luto es la tinta con que debemos escribir,
el luto de los inservibles,
de las mujerzuelas,
del perdido que recibe niebla
cuando deja el bar más insignificante de Santiago.
El luto es la tinta con que debemos escribir
porque en las hueseras tenemos un espacio
y entregamos al Hijo del Hombre
con obscenas risotadas.
Si nos desentendemos de los gritos
un grito enorme nos remece,
si nos desentendemos del dolor
un dolor oscuro nos perfora.
El luto llega con torrenciales argumentos,
rompe la paciencia,
asoma aullidos y toma su lugar.
El luto es la tinta con que debemos escribir,
y si lo olvidamos,
hay cementerios que nos recuerdan el mandato.
¿TE ACUERDAS DE MÍ, LORENZO? YO SOY OTRO ESPECTRO DE LA CALLE CRUCERO EXETER CON LA LENGUA AMORATADA Y EN
ResponderEliminarCORAZÓN DESPACHURRADO. LA SRA. MERCEDES ESTÁ PERSISTENTEMENTE MUERTA, HUELE A NARDOS PUTREFACTOS Y CULEBRAS EN UN FRASCO DE FORMOL.
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Eliminar¿Rodrigo Rojas?
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