lunes, 18 de abril de 2016

FEDERICO GANA/ ANTE LA SOMBRA


Ardían los cirios- perfumes de flores- entre trapos negros;- ahí el ataúd- donde dormía por siempre- la cándida virgen-inmóvil y fría.
Dos hombres charlaban-bajo la penumbra;-el ruido de rezos y lentos pasos.
Se miraban mucho-con angustia incierta.- Uno dijo: -Hace ya veinte años que yo me morí,- y el otro con desden supremo:-¡Hace ya treinta años dejé de existir!

No hay comentarios:

Publicar un comentario