La vida nos maltrata a cada paso y en cada instante.
Vamos a ciegas por un mundo tenebroso e incierto.
Tropezando, emprendiendo el vuelo,
Y sumièndonos en fangos de nostalgia.
Rara vez comprendemos las señales que nos guian;
Y reventamos por dentro,
O expandimos nuestra furia a los cercanos
Destrozando a inocentes
O criminales.
Creyentes del absurdo, nos ahogamos en dudas.
La realidad, juega al blanco y negro
en la ruleta del pensamiento.
Y la fortuna insospechada
Nos liquida a veces y siempre.
¡Detèn tu camino...Retrocede!
¡No sigas el sendero...Despierta!
¡Duerme, Grita, Ama, Sufre!
Y asi las cosas nos llaman por nombres sin profundidad:
¡Pero el desenlace no llega!
Y seguimos caminando como autòmatas...
Dirigidos por los hilos invisibles
De aquel o aquellos prestidigitadores burlones,
Que nos tiran y tiran
En el escenario fantàstico de la humanidad
Inhumana.
Y el fin no previsto se disuelve en las palabras.
En el sinfin de voces inextinguibles o guturales
De mundos desconocidos.
Es locura desatada, retenida por milenios,
Y que en un segundo estalla.
Perdonadme...Soy Loco.
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