MIGUEL URELO VALDIVIA/ MI SUEÑO

Anduve sueños lejanos
entre tanto dormitar la vida,
las locuras florecieron,
me cansé de esperar el alba
y me fui olvidando de mi.


Mi sueño fue prolongado,
en senderos desconocidos,
perdí letras doradas en el polvo
y me penan los versos mutilados.


Esperando el cantar de la aurora,
se desmoronó un castillo al viento,
eran piedras de mi padre
que le sustrajo el andar de la vida.


Soñé la poesía lejana,
por senderos desconocidos,
y en mi caminar inspectivo
perdí trozos de mi alma,
y encontré almas que me bendicen
sus ocurrencias de mi infancia.


Llegó el alba de rayos azules
y recordé que soy mas que pan,
miré horizontes tras los horizontes,
y alejando las barreras, empecé,
a rondar camino largo de tiempo;
acortando distancias en el reloj
a buscar un nuevo sueño que soñar.