martes, 27 de diciembre de 2016

CARLOS CISTERNA LAZCANO/ UN SUAVE Y LARGO BESO


Rojo de verguenza lo icè a mi boca,
y en un suave y largo
beso lleno de sabor y aroma fresco, me sedujo,
suavizo su delicada piel entrte mis dedos
sudando aromas de rocio,

Se hizo deseo y era su carne
un corazòn que el verano le dio latidos,
era el tomate de mi huerto
el que me causaba tanto delirio.

ISABEL EDWARDS/ EL ENEMIGO VIENTO


Pasaràn los dias
malos
de la vida.
Cesaràn los vientos:
se estancarà
la sangre de tu herida.

Murmullan en el bosque,
pinos y palmeras.
Los sonidos del mar
se acercan y alejan.

Diviso un barco
que infla las velas.
Lejos, en la costanera
un pañuelo blanco
se agita.

Bajo las estrellas:
despido los recuerdos

que no me dejan.

martes, 20 de diciembre de 2016

LESTER MARSHALL/ ESO ES TODO


Con los años el blanco
Va a cubrir nuestras tumbas
Y el negro a los que no te amaron.

jueves, 15 de diciembre de 2016

GUILLERMO DE PETRIS/ ESTAMOS EN UN LARGO SUEÑO


Estamos en un largo sueño
que se arrastra
bajo el otoño de las cosas.
Fuimos puestos ahí
por la ceguera de los padres.
Vamos en zigzag
entre cunetas y escaleras,
avezados en esquivar rostros amargos
y sorpresas.

Hay caminos circulares
que llevan hasta uno mismo.
Imágenes sin pasado,
pasado sin imágenes.
Una ruta dolorosa
que se interna en las entrañas
siguiendo el torrentoso grito
de la sangre.

La muchedumbre ordenada
lleva escapularios y cirios
escondidos en la entrepierna.
..Luego de la misa del alba
preparan sacrificios
a esa multitud de dioses paganos
que -aunque nieguen- alimentan.
Porque la ruta de los condenados
se alza entre dos abismos:
De un lado: La cordura,
estrellándose contra sí misma;
..del otro: La insania,
arañando el borde de los precipicios
en que se interna.

En tanto…
Las voces del universo
nos gritan controladas,
con ese mismo fiero control
que rige nuestra desesperanza.

No podemos dar ni un paso en falso.
Una sola equivocación
nos puede costar
la furia de las planillas;
(esas nóminas del "único Dios verdadero")
..que se arquearían hasta arrojarnos
al desamparo de nosotros mismos.
En la roja obscuridad de esa fiereza heroica
-que nos mantiene erguidos,
justo al pie de los barrancos-
..Una luz lejana se alza
como promesa y como burla.
Porque caemos,
..Sucumbimos,
ante la emoción de un súbito recuerdo,
con la ceguera y la indefensión
de la nostalgia.

miércoles, 7 de diciembre de 2016

DAVID AVELLO/RESPLANDOR CREPUSCULAR


Ella se arrima al cerco abre la pierna
Los dedos buscan trajinan debajo de la camisa
Ella se arrima bien mientras
      la mano por sus piernas
Seduciendo sin prudencia
Torturando carne nueva buscando lo lejano
lo desconocido

incoherente
el grito ahogado apagado por la mano fuerte.

ALFONSO GRÈZ/ LULLABY


Gatea niño, gatea a la cuna,
a tus cascabeles, al abrazo estático de tus padres
al hospital gatea, a la mesa de operaciones, niño al hoyo
donde la carne se pudre.

LAUTARO GUERRA VIAL/ SUEÑO NOCTURNO


La otra noche soñé
que volaba.
Sin batir brazos
ni piernas.
Y sin mover ni un pelo.
Sin embargo
volaba raudo
Sin imaginar
donde iba a parar
otras veces
olvido soñar
y sin embargo

HECTOR ANGULO TORRES/ SITUACIÒN DE LA TIERRA


Como una barca sin selecciòn de lo confiable
ahita la soledad y mares venenosos,
ahora nos ponen un timòn de manos
y corazones de grandes pupilas luchadoras
que ayer impidieron tantos naufragios

Sus movimientos cada vez màs audaces
sacuden las manchas de los oceanos
hacia las bocas de la vida
con osadia que sòlo es ausencia de orden
y creciente gravitaciòn de crimenes y vicios.

MIGUEL ALVARADO/ EN VENTA


Vendo una màquina
de escribir,
un cuadro viejo,
y muchas cosas más.
O permuto por una
nueva modelo top.

lunes, 5 de diciembre de 2016

VIOLETA GUIRALDES/ PENUMBRA




Está oscuro pero no importa. Prefiero no
abrir mis ojos para verlo sentado, dando vueltas
las páginas del libro, mientras toma café,
bajo la única luz encendida. Una solamente
para él. Para iluminarse a sí mismo y sus cosas.
Ahí está leyendo, como todos los días, al
lado de su mesa azul. Y a ratos pensando en
su presente y su futuro, mientras yo permanezco
al otro extremo del living, sin moverme,
sin encender luces que lo distraigan. Para
darle en el gusto. Callada, a su lado, como
siempre. Esperando que termine su lectura,
para servirle la cena: carne de cerdo con puré,
como todos los lunes; aunque no sea la ensalada
de la estación y deba ir por ella a la ciudad
vecina. Para que esté contento y no diga:
“Nada está en orden y la casa sepultada bajo el polvo”.
Está oscuro pero es mejor. No tengo ganas
de abrir los ojos. Y con ellos cerrados, mi
mundo se inunda con la luz de mi infancia,
con caricias de manos cálidas. Siento brazos
que me atraen con fuerza, que pronuncian
un “no te aflijas”, un “te quiero”. Y juego con
mis primas a las muñecas y al luche. Corro
por el parque y muevo vertiginosamente las
piernas, para accionar las ruedas de mi bicicleta
y dejarme conducir por ésta hacia calles
cercanas, de amigos. De los que saben
compartir un chocolate, de los que ríen al
unísono. Y los encuentro allí, siempre esperándome
y él no puede impedirlo con un “hasta cuándo”.
Está muy oscuro, pero es tarde, pronto terminará
su libro y me gritará: “Estoy listo”
para que yo corra a calentar la carne a 50 grados,
como le gusta. A disponer la bandeja, con
cuchillo y tenedor en cruz. Con el vaso de
rombos verdes que le regaló su madre, siempre
preocupada de hacerlo feliz. “Con pocas
palabras y buenas costumbres”, como él repite
con frecuencia. Manteniéndose distante,
para no molestarlo y cercana, para escuchar
sus peticiones. Sus solicitudes cada vez mayores
y más difíciles de satisfacer.
Está muy oscuro, es cierto, pero es mejor.
Preferiría no abrir más los ojos.


viernes, 2 de diciembre de 2016

LÌA VILLALOBOS RIVEROS/ HORIZONTE




Quiero llegar a ti
como una ola
descansando en la orilla
de una playa lejana
blanca y espumosa
extenderme sobre ti
y hacer de nuestros cuerpos
una ùnica melaza
arrullarte
abrazarte
como un remolino de agua
que salada se dispersa
en tus superficies
y que sea tu cuerpo
un velero
que se pierde
en la inmensidad
del horizonte.